Juego del Año en España 2012-2014
¡10 años no es nada!
Llegamos al quinto y último capítulo de la serie. A las puertas de que se falle el premio al juego del año 2014, del que hace unas semanas se anunciaron los finalistas. ¿Tenéis vuestras apuestas listas? Pero antes, no nos dejemos atrás los años 2012 y 2013, que ya que nos hemos puesto, vamos a hacer las cosas bien.
Son años (ya en los anteriores, de hecho) en los que la afición ya ha crecido de forma notable. Hay jornadas en muchísimas ciudades, y eso es magnífico. Surgen más grupos de juego, el número de blogs y páginas webs más o menos especializadas es casi inabordable (sin el casi, diría yo), asociaciones, tanto de jugadores como de autores (impensable unos años antes), editoriales… Lo que viene a ser una muy buena salud. Así que podemos esperar que el nivel de buenos juegos se mantenga. Veamos.
En 2012 hubo cinco finalistas al juego del año. Puede parecer una tontería, pero ese, que era más o menos el número objetivo para el JdA, nunca se había alcanzado. Bien por empates o por otras razones, habíamos tenido cuatro, seis y ocho finalistas. Bueno, pues en 2012 y en 2013 se llegó al objetivo. Para no acostumbrarnos, en 2014 hemos vuelto a los seis.
Los finalistas al JdA de 2012 fueron:
- Hanabi de Antoine Bauza (Cocktail Games – Asmodée Ibérica)
- Kingdoms de Reiner Knizia (Edge)
- La Villa de Inka & Markus Brand (Ludonova)
- Santiago de Cuba de Michael Rieneck (Ludonova)
- The island de Julian Courtland-Smith (Asmodée Ibérica)
Hanabi, con el que repite Antoine Bauza, es un cooperativo peculiar en el que ves las cartas de los demás jugadores, pero no las tuyas. ¿Seréis capaces de ordenarlas adecuadamente? Kingdoms es un clásico de Knizia que llega en una edición revisada, y que muestras las características más propias de este autor, en una lucha por posicionarnos mejor que nadie, pero sin esperar demasiado. La Villa es el juego más complejo de los cinco, y nos presenta una novedosa gestión del tiempo y de las “muertes” de nuestros seguidores. Nunca fue tan productivo “deshacernos” de los que nos ayudaron. Santiago de Cuba le da a Michael Rieneck su cuarta nominación al juego del año, record hasta hoy. Viajando por las calles de Santiago buscaremos la ayuda de variopintos personajes y las acciones en edificios populares para conseguir vender nuestros productos. Y finalmente, The Island es una reedición de un clásico juego del año 1982, lleno de maldad. Una isla que se hunde, un mar infestado de criaturas deseosas de comerse al primer despistado, y una “colaboración” entre “amigos” que promete muchas risas. Cinco muy buenos juegos que pueden hacer las delicias de cualquiera.
Entre los que se quedan fueran, hemos de destacar la mención especial que recibe Twilight Struggle de Ananda Gupta y Jason Matthews. Este es un juego que apesta a historia en el mejor de los sentidos. La guerra fría en todo su esplendor, dos jugadores en el bando norteamericano y ruso respectivamente, y una mecánica de cartas utilizables de diferentes modos para dominar el mundo. Sobre el mapa mundial se reflejan los dominios, los aliados, las crisis, la carrera espacial… Twilight Struggle es un juego especial, y prueba de ello puede ser que lleva varios años en el primer puesto del ranking de la BGG. Para un juego exclusivo para dos, que puede alargarse fácilmente a las tres horas, no debe ser fácil estar ahí. Aquí, en la asociación Queremos Jugar hay varios aficionados (¡qué digo, apasionados y expertísimos!) que nos han deleitado con dos ligas y sus correspondientes crónicas. Cualquiera de ellos os convencerá de las virtudes de este juego de mesa. Jason Matthew también es autor de 1960: carrera hacia la casa blanca, y Director de Campaña 2008, junto a Christian Leonard, por si os gustan estos juegos de política más o menos profundos.
Del resto de juegos que no pasan el corte para el juego del año, pues tenemos una magnífica selección. Evo, de Philippe Keyaerts, nos propone una lucha por la supervivencia de nuestro grupo de dinosaurios, en Eclipse de Touko Tahkikallio nos vemos inmersos en la lucha por la galaxia, o si nos gusta la mitología, Cyclades de Bruno Cathala&Ludovic Maublanc nos traslada al Egeo para luchar por los favores de los dioses y bestias mitológicas. Experiencias más relajadas con Divinare de Brett Gilbert, Timeline-inventos de Frédéric Henry, Fantasma Blitz de Jacques Zeimet (quizá lo de relajado aquí no cuadre tanto), o La noche de los magos de Kirsten Becker y Jens-Peter Schliemann, para jugar a oscuras, ideal con niños. Verbalia, juegos de Màrius Serra y Oriol Comas nos propone jugar con las letras, palabras y sílabas. Y volviendo al grupo de juegos más “profundos”, Lancaster de Matthias Cramer, Mundodisco: Ankh-Morpork de Martin Wallace, ambientado en las novelas de Terry Pratchet, Alta Tensión: las primeras chispas de Friedemann Friese, hermanito pequeño del Alta Tensión que fuera finalista (y para mi gusto, una adaptación y simplificación sencillamente sublime), Goa de Rüdiger Dorn, Gloria a Roma de Carl Chudyk, y Ora et Labora de Uwe Rosenberg, que continúa proporcionando a sus seguidores evoluciones de su reconocido Agricola. Desde luego, 2012 fue un año de muy buena cosecha.
Y así las cosas, el premio al juego del año va a parar a Santiago de Cuba, con lo que Rieneck se convierte en el primer autor en repetir galardón al JdA. Santiago de Cuba nos presenta un juego de mesa muy accesible y con una alta variabilidad, ya que el tablero es diferente en cada partida. Avanzando por él podremos ayudarnos de las habilidades de personajes, los cuales a su vez nos permiten utilizar los edificios de un barrio concreto. Dado que la posición de los personajes y de los edificios en los barrios es aleatoria en cada partida, la situación a analizar cambia. El objetivo, conseguir recursos, para poder embarcarlos a cambio de puntos, y dinero, para poder movernos con mayor libertad por el tablero. Un juego muy dinámico, sencillo y divertido, y además vistoso, lo convierten en una muy buena opción para introducir a nuevos jugadores.
Y así hemos llegado al año pasado, ¡cómo pasa el tiempo! La última edición del JdA también tuvo, como hemos dicho, cinco finalistas, y como viene siendo habitual, de lo más variado.
- El Principito de Antoine Bauza & Bruno Cathala (Asmodée Ibérica)
- Las leyendas de Andor de Michael Menzel (Devir)
- Polilla tramposa de Emely & Lukas Brand (Devir)
- River Dragons de Roberto Fraga (Matagot – Asmodée Ibérica)
- San Juan de Andreas Seyfarth (Devir)
San Juan es el hermano pequeño del archiconocido Puerto Rico, una magnífica versión de cartas que capta todo el sabor del juego original, simplificandolo ligeramente. Polilla tramposa es un juego especial. Sus autores no son sino los hijos de Inka y Markus Brand, los autores de La Villa. Sí, unos niños. Y ya sabemos que los niños son un poco tramposos, así que Polilla tramposa es el primer juego que nos anima a hacer trampas para poder deshacernos de nuestras cartas de bichos. El Principito, y nuevamente tenemos a Bauza, que ya es como de la casa, y a Cathala por aquí. Apoyado en las preciosas ilustraciones del propio Exupery para su mundialmente famosa obra, el juego nos propone la construcción de un planeta, con unas condiciones de puntuación propias para cada jugador. Las leyendas de Andor supone el debut del reconocidísimo ilustrador Michael Menzel, del que se puede admirar su obra en multitud de juegos. Andor es un juego colaborativo ambientado en un mundo fantástico, y desde luego, su aspecto gráfico es espectacular. Y River Dragons es la primera obra de Roberto Fraga, y una de sus más serias (Roberto es más bien conocido por sus alocados juegos, como La Danza del Huevo). Una carrera a través de islotes para cruzar el tablero, cruzando puentes de lo más inestable.
Y por supuesto, entre los no finalistas seguimos encontrando muy buenos juegos. Y como siempre, seguro que no están todos los que son, así que indaga y busca tus muy favoritos. Entre la producción española destaca Bauhaus, de Jordi Gené y Gregorio Morales, un elegante abstracto para hasta cuatro jugadores, algo no muy habitual entre este tipo de juegos, Huida de Silver City, de Diego M. Lobariñas, en pleno apogeo de los juegos tipo “survival” y la invasión zombie de los últimos años, y Polis, de Fran Díaz, un juego complejo para dos jugadores ambientado en la lucha entre Atenas y Sparta. Del resto, podemos destacar la llegada de un auténtico clásico de los juegos modernos, El Grande, el padre de los juegos de mayorías, ambientado en España, y obra del tándem Kramer&Ulrich, y otro clásico de otro de los grandes autores, Schotten Totten, de Knizia. Un juego de combinaciones de póker donde a veces lo más conveniente es no jugar. Lástima que esté prohibido. Otros juegos interesantes, Rialto, de Stefan Feld, uno de los autores más reconocidos en los últimos años, que nos propone otro juego de mayorías con algunos alicientes, Tuareg, un muy buen juego para dos creado por Andreas Steiger que incluye un mecanismo geométrico muy curioso, pasatiempos como Se Vende de Stefan Dorra y Tiro al pato de Keith Meyers, o el juego de cartas Galaxia-La conquista, de Tom Lehmann. Y no, no olvido el que para muchos es uno de los mejores juegos del universo conocido. Through the Ages-Historia de las civilizaciones, de Vlaada Chvátil, nos pone a planificar nuestra civilización sin descanso, mejorando paso a paso, ayudándonos de grandes líderes históricos, descubriendo tecnologías, y todo ello con un sistema elegante y preciso como un reloj. No es apto para no iniciados, desde luego, pero es lo que se diría un “señor juego”.
Pero el triunfador del JdA del año es el debutante, Michael Menzel, quien con su primer (y al parecer único y último juego) cosecha éxito tras éxito. Las leyendas de Andor es ganador del Spiel des Jahres, y consigue también el JdA con un juego colaborativo con unas reglas muy especiales. En la primera partida, se van aprendiendo los mecanismos a través de la aventura propuesta. Así, las siguientes aventuras introducirán nuevos elementos, y la dificultad irá progresando, sin la necesidad de leer un largo manual. Menzel es por supuesto el ilustrador, y nos da muestra de su capacidad creativa en un juego visualmente espectacular. Y además, rompe una especie de maldición, pues es el primer autor invitado al Festival de Juegos de Córdoba, donde se anuncia el ganador, que lo gana. Anteriormente, autores como Michael Rieneck en 2009, Antoine Bauza en 2011, o Inka y Markus Brand en 2012, eran los invitados al festival y tenían presencia entre los juegos finalistas, pero no obtuvieron el premio. Menzel es el primer premiado que puede recoger en persona el trofeo.
A las puertas del décimo premio al juego del año, no queda mucho más que decir. Este año tenemos seis finalistas, y por primera vez se ha dado además una lista de trece juegos recomendados, juegos de mesa que por motivos diversos no han podido estar entre los finalistas, pero que el jurado quiere destacar. No me extiendo, que esa información está fresquita en la web del premio.
Para terminar, un poquito de numerología y ranking, que estas tonterías nos gustan. En nueve ediciones del juego del año, Michael Rieneck ha alcanzado cuatro finales, llevándose el premio en dos ocasiones, por lo que es el indiscutible oro de nuestro podio. La plata sería para Friedemann Friese y Knizia con tres finales en el JdA, una de ellas premio. Para el bronce, Rosenberg, con dos finales y un premio cada uno. O para Bauza, que no ha ganado nunca, pero ha sido finalista en las cuatro últimas ediciones del JdA. Bastantes autores han llegado a dos finales (Maublanc, Kramer, Faidutti, Dirk Henn, Cathala, Wallace, Seyfarth). Este año, quien sea que gane, será un nuevo ganador.
¿Qué valor tiene el JdA? Difícil de decir. Como decíamos en el capítulo de introducción, nuestro criterio debe seguir prevaleciendo, pero una guía nunca está de más. Si pensamos en una ludoteca construida a base de los ganadores del JdA, nos encontramos con muy buenos juegos. Si extendemos nuestras elecciones a los finalistas a lo largo de los años, tenemos todavía más buenos juegos. Al fin y al cabo, no se trata más que de eso, de dar una pista, que a los más enterados de la situación quizá no les sea necesaria, pero que muchas personas quizá agradezcan. El premio va creciendo y evolucionando con la propia afición, y así van los diez años. ¿Tenéis vuestro ganador de 2014? Seguro que es bueno. Mientras, divertíos jugando. Nos vemos en otros diez años.
Si te ha parecido interesante este artículo, recuerda que puedes darle un repaso a los 10 años de historia del JdA en la serie de artículos que hemos publicado:
- 10 años del Juego del Año en España
- Juego del Año en España 2000-2004
- Juego del Año en España 2005-2006
- Juego del Año en España 2007-2008
- Juego del Año en España 2009-2011
Ale, se acabó. Simplemente reiterar mi agradecimiento a las personas que han hecho el trabajo de edición, porque sin él, hubiera sido imposible.
Saludetes.
Gracias a ti ¡Monstruo!
Pedazo de entradas que nos has regalado. Esto es un colaborar de altura, sí señor.
Gracias a tí Javi por esta serie de artículos tan buena, y por darnos un repaso a toda la historia del Juego del Año en España, he disfrutado como un enano leyendo tus artículos, eso sí, he de reconocer, que algunas partes se me hicieron un poquito largas 🙂 En la próxima más artículos y menos concentrados.
Por cierto, mi candidato para este año, Augustus.
Saludos!
Grandísimo aporte estos 5 artículos para la pagina Web, gracias Javi, aunque en los juegos que puntualizas como juegos buenos de cada año, hecho en falta Juegazos como Galáctica, Mansiones de la Locura, Descent etc…
Por otro lado para mi el juego que gana este año es el Sherlock Holmes, perdón que ese no esta nominado ni recomendado…
Yo creo que la cosa esta entre el Bingus y el Camel UP. y me decanto más por que va a ser el segundo.
Jorge, eres un tocapelotas 🙂 Y no se me olvidan las collejas que te debo por lo del Sherlock…
Brutal el repaso a esta pequeña (o no tan pequeña) parte de nuestra historia.
Creo que el objetivo de proporcionar una cierta perspectiva sobre qué es el premio, de donde viene y a donde va.. ¡está conseguido!
1 abrazo Javi y ¡enhorabuena por el trabajo!
Yo creo que va a ganar el Jaipur, fijo
Muchas gracias por tus artículos Javier!
jajajaja no vale postearlo después de que den el premio.
Por otro lado me retracto de lo dicho y me quito el sombrero después de le hayan dado al sherlock Holmes la mención especial.
Gracias a todos por los comentarios. Me alegra que os haya gustado/interesado la serie. Ahora, a descansar un poco de escribir, que al final todo fue un poco a velocidad luz 🙂
Abracetes